OPINIÓN DE ROBERTO LAVAGNA

Hace ya tres años que están saliendo capitales de la Argentina por falta de confianza y se han ido casi treinta mil millones de dólares en ese período. Se trata de recursos que estaban en la actividad productiva y creando empleo, pero que se están yendo por la desconfianza creciente. En el 2006 se fueron alrededor de 3.000 millones de dólares, en 2007 salieron 8.800 millones de dólares, y este año 2008 ya se han ido alrededor de 16.500 millones de dólares. Entonces, el Gobierno debería entender de una buena vez que la prioridad no es el blanqueo de capitales, sino crear las condiciones para que el dinero que está adentro del país no se vaya, en lugar de querer implantar un proyecto de blanqueo que es pésimo y decididamente peligroso, para que terminen viniendo fondos de un origen muy dudoso.

Ahora sería muy bueno para todos los argentinos que los Senadores Nacionales ejerzan el derecho a decidir con criterio propio, sin dejarse presionar por nadie. Es deseable que ellos tomen real conciencia de lo equivocado y dañino que resultaría aprobar este proyecto y lo rechacen de plano, dejando como estaba la legislación argentina en la materia, ya que hasta ahora nos manejamos con normas acordes a las que funcionan internacionalmente.

De todos modos, aunque los Senadores cometan el error de aprobar el proyecto, lo que está claro es que esa ley nacería con enormes dudas y en un futuro no muy lejano los "blanqueadores" terminarán rindiendo cuentas frente a las autoridades impositivas y a la propia justicia.

Roberto Lavagna, 18 de diciembre de 2008.